¿Quién no se ha llevado algún susto cuando le llega la factura de la luz? A todos nos ha pasado.
“Pero si este mes he tratado de apagar las luces al salir de la habitación, además, he amontonado la ropa para poner la lavadora”
Te pones a revisar la factura, y te das cuenta de que hace falta un diccionario para entender lo que te están cobrando…
En este artículo, te damos las claves para desentrañar los misterios que aparecen en ese papelito que llega a final de mes y que tanta ansiedad nos crea. LA FACTURA DE LA LUZ.
La potencia.
El primer concepto en el que hay que fijarse es en la potencia contratada, y lo que te cobra tu comercializadora por ella. Es importante que sea adecuada a lo que realmente consumes, ya que si la potencia no llega, saltará el contador y se irá la luz, y si tienes contratada más de la que necesitas, se va a incrementar la factura. (Por ejemplo, una bombilla de 100 vatios consume 100 vatios de potencia activa.)
El precio de la potencia es diferente en estos dos periodos:
- La potencia punta de 8 de la mañana a 24 de la noche.
- La potencia valle de 24 de la noche a 8 de la mañana, y todas las horas del sábado y domingo y festivos. (La potencia de valle será mucho más barata)
Se pueden contratar potencias diferentes para cada periodo.
El consumo.
Aquí la comercializadora te va a cobrar por la energía consumida, hay que fijarse en el precio por kw que tienes contratado.
El precio por kw (consumo) es diferente en estos tres períodos:
- El periodo de punta: con el precio más elevado, de 10 de la mañana a 2 de la tarde y de 6 de la tarde a 10 de la noche de lunes a viernes no festivos.
- El periodo de llano: un precio menos caro de 8 a 10 horas, de 2 a 6 de la tarde y de 10 a 12 de la noche
- El periodo de valle: con un precio reducido comprende las horas nocturnas (de 0 horas a 8 de la mañana) y todas las horas del sábado y el domingo y festivos.
Cada comercializadora te dará diferentes opciones, las hay que hacen discriminación por horas y las hay que te ofrecen el mismo precio en todos los horarios. Ten en cuenta lo que más se adecúa a tus necesidades.
Alquiler de equipo del contador.
Si no tienes un contador propio, en este concepto verás reflejado lo que se cobra por el alquiler del equipamiento.
Impuestos.
Actualmente la factura de la luz incluye los siguientes impuestos:
- El impuesto sobre la electricidad (IE)
- Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA)
Otros conceptos.
Muchas veces, la comercializadora para poder ofrecerte una promoción en el precio del kw, va a meter en este apartado conceptos como seguros, etc. Fíjate bien si los necesitas, y si no, dalos de baja, porque pueden suponer hasta 10 € del total de la factura.
Para saber si tienes bien contratado este servicio, tienes que comparar los precios de estos conceptos, y adaptar la tarifa que tienes contratada a tus necesidades reales, con estos pequeños ajustes, puedes ahorrarte hasta un 20% en la factura de la luz, que siempre es un alivio.
Si necesitas ayuda, o tienes alguna duda, ponte en contacto con nuestro equipo. El control y la reducción de costes son básicos para hacer más rentable tu salón.
BLOGS RELACIONADOS
La Estrategia 1+1 en Coloración ¿Oferta o Truco Psicológico?
El mundo de la peluquería, al igual que otros muchos sectores, está inundado de estrategias de marketing diseñadas para atraer a los...